El empresario asume la deuda del club y se compromete a pagar a plazos los salarios atrasados a los jugadores y cuerpo técnico, quienes llevaban toda la temporada sin cobrar, camiseta barça y con la esperanza de conseguir el ascenso a la Primera División. Además, el club ha sido dirigido por un comité de empleados, que gestionó el club durante la guerra civil, y varias comisiones gestoras. Hubo que esperar a la segunda jornada, cuando los gijoneses se enfrentaron al Deportivo de La Coruña, para ver el primer gol del equipo en Primera División, que marcará Gundemaro.